C2C: De “consumer to consumer” a “community to community”, o el intercambiador urbano.
PALEOCOMERCIO o el retorno del trueque.
Desde hace tiempo el dinero ha perdido en buena medida su función primordial de facilitar el comercio de otros bienes para convertirse él mismo en un bien. El trueque está resurgiendo como forma paralela de intercambio de bienes y servicios en ausencia de dinero, en muchos casos gracias al soporte de Internet y de las redes virtuales. Este “paleocomercio” ofrece una oportunidad de restar importancia al “valor de cambio” de los bienes (y servicios) y de agudizar su “valor de uso”. El trueque puede convertirse, si dotado de espacios y sobre todo de una “infraestructura” mínima, en una ocasión de intercambio a una escala social y urbana. Se convierte en un mercado al aire libre, en una ocasión de encuentro social que permite activar un espacio latente y convertirlo en un espacio público. El trueque puede formar parte de un estilo de vida menos orientado al consumo y más al reciclaje, puede ser una ocasión lúdica., un “speed-dating” motivado por el intercambio que permite además establecer nuevos contactos, puede ser una ocasión para mutar de consumidores a prosumidores (productores + consumidores) proponiendo el intercambio de productos hechos por nosotros mismos (o servicios).
¿CÓMO? (1. componentes)
Se propone un KIT formado por tres componentes, desmontables y adaptables
Se trata de 1 SUELO formado por tableros fenólicos del tipo que se utiliza en andamios y en los pisos de los trailers + 1 ARMARIO MODULAR, una pared equipada que sirve de INFRAESTRUCTURA BÁSICA del espacio, básicamente que permita almacenar mobiliario urbano (mesas plegables y sillas) pero que pueda también dar cabida, como en el ejemplo, a unos aseos y a un elemento bar / cocina. + SISTEMA DE ILUMINACIÓN tendida que aprovecha la instalación urbana en las fachadas que habitualmente se utiliza en las navidades.
¿QUIÉN? (2. uso y gestión)
El KIT es accesible mediante uso de llaves “compartidas” entre distintos actores sociales radicados en el barrio, en el caso de la propuesta la Asociación de Vecinos de Chueca (AVCHUECA), el colectivo LGTB, los colegios públicos y las asociaciones juveniles del barrio. Su uso podría ampliarse también a través de una página web (¿www.c2c.es?) que se convierte en el “espejo” virtual del espacio real, una herramienta de enlace entre distintas asociaciones que permita organizar las convocatorias y la gestión del espacio urbano. Así por ejemplo, más allá del mercado de truque, podrían organizarse mercados de productores locales (“farmers markets”) o simplemente reuniones al aire libre de colectivos que toman “prestado” el uso del KIT para una ocasión. Se trata de establecer una gestión colaborativa e introducir mecanismos de “recaudación” puntual para facilitar el mantenimiento del espacio.