APRENDER y JUGAR, o usar la "OREJA VERDE" (aprender a jugar, jugar para aprender o aprender jugando y aprender sin jugar) por ello el colegio se puede entender como un parque de "juego" donde, apoyándonos en estos contrastes (pero habría muchos más, solo se trata de seguir pensando) se promueva y estimule el APRENDIZAJE. La propia arquitectura es al soporte de un RECORRIDO educativo al que acompaña mediante la definición de espacios, interiores y exteriores, de texturas y colores.